esta mañana de verano.
El pueblo está dormido,
los niños descansan de sus juegos,
mientras yo me veo desorientada
y adormilada por mi insomnio.
Sé que tengo que seguir buscando
a la persona que fui, la que está ahí
en mis ratos de felicidad y sosiego.
La ciudad me acoge sin memoria,
siento como si me persiguiera
el sonido cansado de mis pasos.
María Arteaga
***
8 comentarios:
Buscar al que fuimos suele ser una tarea condenada al fracaso. Afortunadamente, habría que añadir. Como reencontrarse con quienes no vemos desde la infancia, suele tener un regusto a decepción.
Suerte en la tarea, pase lo que pase. Abracitos.
Hola María! Me gusta mucho el poema, especialmente los tres últimos versos, son geniales. Un abrazo.
Buenos días, preciosa.
Perdona mi tardanza, pero no he podido llegar antes.
Es una maravilla, Jesús sabe apreciar el arte hecho poema.
Un beso y feliz fin de semana, mi niña.
Escritora de la vida, poeta del alma.
Es precioso y muy profundo. Un beso
Hola María.
Imposible que la ciudad no te recuerde.
A lo mejor, ha cerrado los ojos al verte pasar. Estará celosa.
Un beso, preciosa.
Verano, verano. Feliz cumpleaños
con un pelín de atraso. Besos
A pesar de los que ya tienes: "SIN COMENTARIOS"
Bello, bella. Besos
Linda, eres linda por fuera, por dentro. Me gusta.
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