Cruzo la calle y te quedas ahí,
imagino que observas como me alejo.
Yo no quiero mirar atrás,
hago caso a mi corazón acongojado.
Hace un rato que estabas junto a mí
y tus ojos reían emocionados,
ahora pienso como y donde estás
suspirando porque regreses a mi lado.
Llegará el día que no te marches...
que compartamos nuestro tiempo,
de forma alegre, sosegada...
y nos besemos cuando queramos.
María Arteaga
***
5 comentarios:
Siempre es un placer pasear por este pasillo.
Un besito.
Hola, María.
Unes versos y sentimientos, siempre hermosos.
Un beso, mi niña.
Vuelve a cruzar la calle, no pierdas el tiempo.
Escribe, preciosa.
Sra Marìa : Tanto tiempo , es muy placentero pasar por su casa y sentir estas caricias al alma .
Vi que paso por mi rincòn .... y disculpe no entendi bien que paso con nuestra querida amiga Pececita .
Un fuerte abrazo y bienvenida
Gracias a todos.
Mi querida Rosna.
Nuestra pececilla falleció el día 3 de febrero. Parece una pesadilla, pero es cierto.
Un beso de infinita tristeza.
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