sin encontrarte,
y sin embargo, estás conmigo.
Te busco entre los libros
y en las puntas de mi lápiz,
en la taza de café
o en la música que escucho.
Encuentro tus palabras
de viento al caer la tarde,
cuando el sol se tiñe de naranja
y me refugio en el recuerdo.
Tu ilusión vive conmigo
siempre, porque siempre eres
compañero de mi viaje.
María Arteaga
***
6 comentarios:
¡Dios mio que bonito!
Un besico, ni niña.
Afortunado compañero.
Es encantador tu poema, murciana
Hola María.
Siempre escribes con el alma a flor de piel, siempre emocionas.
Me quedo un rato por este rincón.
Un beso.
Así, de esta manera, no se siente la soledad... siempre se está acompañado.
Abrazos.
Ummmmmmmmm.
Felicidades por sus versos encantadores.
Saludos
PRECIOSOOOO
Que bonito escribes.
Un beso.
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