Tiembla mi cuerpo cuando pienso en sus labios, noche clara de otoño con faroles de estrellas y caricias de enamorados. Su piel en la mía, su boca en mi llanto callado, dile a la luna que se duerma temprano que tengo para él deseo, besos y abrazos. María Arteaga ***
4 comentarios:
El Sol
dijo...
Las caricias son tan necesarias como beber agua. No dejes de tener sed. Mucha sed de amor.
4 comentarios:
Las caricias son tan necesarias como beber agua.
No dejes de tener sed. Mucha sed de amor.
Un beso, mi niña.
Apasionado, rítmico y musical
¡Precioso!
André
Muy bonito, preciosa.
Nos tienes mal acostumbrados, todos deseamos eso.
Tienes una forma de escribir muy bonita, murciana.
Besos
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