Manos de seda

Ayer, aprovechando que el día amaneció lluvioso, decidí ir a la peluquería. Necesitaba acortar el largo de mi pelo unos centímetros. La lluvia me acompañó en mi paseo hasta Dambell, una vez que abrieron las puertas de la pelu, subí las escaleras y le dije a la chica lo que deseaba. Un joven muy simpático me invitó a que le acompañara: ya estaba en sus manos. Como es costumbre en mí, le pregunté su nombre. Me dijo que le llaman Juan Carlos y que vive en Fortuna. Después de ponerme el color y esperar los 30 minutos de rigor, le seguí hasta el lavabo y con el agua calentita empezó a lavar mi cabello. Le pregunté si se mordía las uñas, a lo que él me respondió que no, el tema es que sus manos parecían de seda, el masaje que mi cuero cabelludo recibió era maravilloso, despacito y con sumo cuidado, lavó mi pelo hasta dejarlo listo para que una compañera me lo cortara como yo le indiqué. Le prometí a Juan Carlos que contaría en este blog su buen hacer, y es lo que hago. Muchas gracias a todos por su amabilidad. Por cierto, cuando llegué a casa, me di cuenta que el paraguas que cogí no era el mío, este es más flojito, a la señora que le hice el cambio le vendrá bien. El mío es mejor. espero que no le importe, si quiere nos lo volvemos a cambiar. :-)

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Cuando llego al trabajo, Rocío me espera como siempre, yo me acerco hasta ella e intercambiamos saludos y algo más. Se suman los compañeros que van de paso por el pasillo, saludan, contesto y aparecen los dos Manolos. El más maduro saluda con su risa franca y un hola y prosigue su camino, el otro Manolo se queda junto a nosotras. Nos cuenta a Rocío y a mí cómo se conoce las artes marciales que practica, cómo hace que funcione su mente en positivo. No sé cómo y el porqué Rocío empieza a reír y sale a la palestra el nombre del oso panda que vivía en el Zoo de Madrid, ella busca en Internet y aparece la noticia de que en el año 1996 murió Chu-Lin.

Hace 2 años que tenemos una pareja de osos de nuevo. Nos miramos incrédulos y pensamos apenados lo pronto que se nos olvidan las cosas. La vida es dura, me lo dijo alguien hace poco :-(

MNA

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