domingo, 29 de agosto de 2010

Reflexiones



Mira por donde me siento reflejada en este dibujo. Me encanta leer aunque llevo un tiempo que los libros se quedan a medias y se amontonan en mi maravillosa biblioteca casera que tengo detrás donde ahora escribo. Mi "despacho" es una salita de...veamos: 5x3 metros muy bien aprovechados. Hay dos muebles llenos de libros, mis trastos y una mesa con dos ordenadores. El de sobremesa (éste lo tengo abandonado) y mi precioso portátil (Asus los dos). Una silla de las llamadas de director, un sinfonier con un televisor que aún no he estrenado y lo tengo 3 meses, dos sillas de anea de las que llaman de modista (bajitas, por no olvidar mis tiempos de costurera) y dos sillones de relax de color granate; el que está a mi derecha me sirve de mesita auxiliar. A lo que iba...

Ayer pasé un día triston, dando vueltas como una peonza y con el ánimo por los suelos, pero creo que no tenía motivos para sentirme así. Tengo lo necesario para vivir, amor a espuertas, un montón de amigos, mi familia a la que adoro, dos hijas maravillosas y aunque no os lo creáis, dos nietos preciosos; además ahora están disfrutando del verano en la playa junto a sus padres y su otra abuela, Loli y también tengo salud y trabajo.

Esta mañana escuchaba las noticias con el desastre de las inundaciones de Pakistán, mineros atrapados en una mina en Chile, miles de soldados que aún quedan desplegados fuera de sus paises (aunque los americanos abandonen Irak) y cientos de desgracias que parecen mentira que ocurran.

Ayer, cuando salí a hacer la compra, vi una escena que, por la existencia de un supermercado cerca de casa, veo a diario; personas buscando algo que llevarse a casa, si es que la tienen, en los contenedores de basura. Les di los buenos días y les regalé una de esas sonrisas que no encontré durante el día y que se quedó con el señor que me contestó con un "buenos días señora" y siguió rebuscando entre la basura. Para la comida hice un arroz a la marinera con marisco para dos personas, que muy bien podía haber sido para más. A pesar del derroche no hice nada para remediarlo, y que siento de veras.

María Arteaga


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sábado, 28 de agosto de 2010

Melancolía



Hoy no sé que le pasa a mi corazón.

Anda triste y melancólico
como la cigarra que canta solitaria.
De vez en cuando se para...
a veces da un salto de vértigo
y otras se agranda demasiado,
sin espacio para tanta emoción.

Hoy no sé que le pasa a mi corazón.

Seguramente anda perdido
como mi risa, que no la encuentro.
Sale de mi boca una mueca,
una triste sonrisa que no es mía,
sino de mi estado de ánimo,
ese que acompaña a mis días grises.


María Arteaga


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jueves, 26 de agosto de 2010

Mis espinas




En sueños vives encadenado a mí
como la rosa a las espinas y al rocío de la mañana.
Al despertar dibujo con mi mano tu rostro
para que no desaparezcas.
Recorro sobre el vacío el hueco de tus ojos cerrados,
el perfil de la forma ondulada de tu boca,
de tu nariz, hasta llegar al final y hacer que sonrías.
Dibujo el tacto cálido de tu piel,
el lóbulo de tu oreja perfecta
y el suspiro que sale de tu alma.
Plasmo sobre el silencio tu presencia
para que sigas a mi lado,
y digo susurrando tu nombre
suplicando al alba que me ayude.
Pero la aurora celosa te lleva con ella
caminando contigo en la distancia.
Sin querer odio lo que me separa de ti
hasta que siento que estás conmigo,
cuando escucho tu voz dulce y serena
que pronuncia la palabra que sólo tú sabes.
Y me quedo dormida para volver a soñarte
hasta que el Sol, me hace llorar.



María Arteaga


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domingo, 22 de agosto de 2010

Aromas, sentidos y luz



Sándalo, rosas, velas, música, caricias, risas, tú.

Momentos, días felices...

Versos en mi boca, lágrimas de emoción.


María Arteaga


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jueves, 19 de agosto de 2010

Desde aquel día




Desde aquel día soy como un brote de ti.
Si alguien ve dos trocitos de corazón
deambulando por el universo,
que no los dejen marchar sin rumbo,
que tienen dueño, latidos y sentimientos.
Que lancen una cometa al cielo,
con tu nombre y el mío.
Con una flecha en diagonal
y las puntas bordadas en color de viento.
Que callen todas las voces del mundo
para que solo se escuchen tus suspiros
y lleguen pronto hasta mi .
Mi respuesta será...te quiero,
ven rápido, mi cielo,
que sin ti nada tiene sentido.


María Arteaga


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lunes, 16 de agosto de 2010

Emanuel Menta, un artista



El año pasado, cuando comenzó en el Centro Cultural del Carmen el Taller de Creación Literaria, nos encontramos muchos de los alumnos de años anteriores y otros nuevos. Entre un grupo que se desbordó en número (más del doble de los que el profesor deseaba), estaban María 2, Diana, Alicia y Emanuel. Hay más, pero estos son de los más jóvenes y creativos.

Esta entrada en mi blog es para hablar de Emanuel, el chico argentino. Al conocerlo era para mí un chico tímido, amable, educado y muy buen escritor. El primer día de clase sentado frente a mi, me regaló un pequeño relato del que era autor, titulado "Cadencia" y al leerlo comprendí que era algo más que ese chico nuevo.
Con el paso del tiempo, casi un año, he descubierto a un amigo estupendo, un escritor fabuloso (ganó el 1º concurso de Cuentos de Navidad El Carmen 2009) y además un excelente músico. Pertenece al grupo musical "Con Sal Jazz" y él es el pianista. Me gusta ese nombre porque toca el piano como los ángeles. Si tenéis la oportunidad de ver y oír a este grupo de jazz, no os lo perdáis, merece la pena. Qué suerte la de Alicia, que además ha conquistado su corazón. En realidad creo que la suerte ha sido para los dos ya que entre clase y clase se han enamorado, ¡que bonito!.
Ya no son los chicos nuevos. Ahora pertenecen al grupo de mis amigos, a los de siempre. Deseo dar las gracias a todos, pero hoy muy especialmente a Alicia y Emanuel: se las merecen.

Gracias, gracias, gracias...amigos.

María Arteaga


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martes, 10 de agosto de 2010

Apenas sin voz





Entre las hojas de nuestro libro
está el reloj que marca el tiempo
de ilusiones y emociones,
de sentimientos, risa y llanto,
de corazones unidos.
De poemas que son de otro poeta
pero que haremos nuestros.
Hoja a hoja nos acercaremos,
verso a verso nos besaremos,
letra a letra llegaremos al día
del encuentro.
El poder de las palabras
hará el milagro de unirnos más,
de sentirnos más amados
y ocupará este tiempo de ausencia.
Volemos con la imaginación
donde tú estás y yo te espero.
Leamos el último poema juntos,
despacito, apenas sin voz,
tu mejilla unida a la mía
y nuestras almas...
bailarán de alegría.


María Arteaga


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domingo, 8 de agosto de 2010

El segundo cumpleaños


Hay caramelos para todos, son de menta

Aunque figure en algún lugar que este blog nació en octubre del año 2008, no es cierto. Se quita meses por pura coquetería. Nació en una hermosa mañana de agosto, en un museo de Murcia donde yo trabajaba por aquéllos días. La hora del desayuno era muy bonita, yo me llevaba algunos de mis poemas y Esperanza (una mujer estupenda, dulce y buena lectora los leía).
Ayer vi en casa de unos amigos la película El Lector y os la recomiendo.
Ya de vuelta a casa y recordado la historia pensé en como surgió la forma de hacer el blog, su creadora y el nombre que le pusimos. Entonces se me ocurrió hacer una pequeña fiesta de cumpleaños a este lugar donde tantos amigos llegan y contar su vida de forma tal como empezó.
Esperanza se ofreció a confeccionarlo paso a paso, diseño, nombre, perfil, foto. etc.
Algo ha cambiado desde aquel día. Los bordes de flores marrones del formato han desaparecido, mi perfil y foto han sido sustituidos por necesidad de actualización, pero lo que no ha cambiado ha sido el nombre.
La idea de éste me llegó a través del piropo de un amigo: Justo. Un día me dijo: María, eres como un pasillo encerado en virtud de quien te recibe. Tu simpatía y sonrisa hace fácil el acercamiento de los que estamos enfrente de ti. . Me sentí emocionada y agradecida. Justo siempre huele a menta de jardín, porque es limpio por dentro, por fuera y por sus chicles mentolados.

Pues eso, muchas gracias a Esperanza y a Justo, ellos son los culpables del nacimiento y del bautizo.


María Arteaga
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lunes, 2 de agosto de 2010

Cuando te marches




Si algún día te asalta la pena,
la añoranza de tu gente, de tu tierra,
cierra los ojos y... piensa.
Piensa en los que son tuyos,
en tus amigos y compañeros,
en nosotros, tus alumnos.
Has arado, sembrado y regado.
Ahora tienes que recoger la cosecha
de la tierra fértil que eres dueño.
Si se apodera la duda,... sueña
en piratas y pilotos de cuento,
en cajitas de hojalata y ojos de canela.
Verás que pronto pasa el tiempo.
Antes de que florezca el almendro
estarás de vuelta en clase diciendo:
escribir en diez minutos un cuento.
Y nosotros seguiremos como siempre,
sonriendo, hablando y trabajando
porque así nos has hecho.
El mérito es tuyo, profesor y amigo.
Gracias



María Arteaga

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