miércoles, 25 de mayo de 2016

Música de amanecer

















No existe día que no escuche el silencio del alba.
Mis sentidos despiertan temprano, apenas duermen,
si acaso se esconden de mí temerosos.
Hago recuento de mi pasado, imagino el futuro
y me olvido de vivir el presente.
No disfruto con intensidad lo que tengo
y me asusta lo que puede pasar de inmediato,
por ello, mi mente no descansa, y mi alma,
sufre sin sentido.
A lo mejor, llega el momento que todo esté ordenado,
o al menos, me acostumbre a este lío de ir y venir,
de echar de menos lo que poseo a ratos,
quizá madure mi forma de ser, aunque...
pierda en esa madurez la frescura de mi risa,
eso que es mío desde que nací, hace ya tiempo.


María Arteaga


***

5 comentarios:

El Sol dijo...


No pierdas nada de lo que tienes, lo que es tuyo, y mucho menos tu risa.
Feliz día, mi niña. Besos

Ignacio dijo...

¡Maravilloso!

Anónimo dijo...



Leer tus versos enseñan a imaginar otro mundo que yo no veo.
Precioso

uno de cerca dijo...


UN PLACER PASAR OTRA VEZ POR AQUÍ. ME GUSTA

María dijo...


Gracias...