caricias en el pensamiento
trajo la libélula madrugadora
al colarse por la ventana.
Apenas sin fuerza, exhausta,
se dejó caer en mi almohada.
La cogí entre mis manos
para llevarla a la libertad,
pero ella sintió paz y alegría
y decidió volar a mi lado, libre.
Ahora es parte de mi mundo,
alerta cuida mi descanso...
fiel guardián de mis sueños.
María Arteaga
***
9 comentarios:
¡María que hermosa libélula nos has regalado!
¡Qué dulce y precioso poema!
Besos.
¡Quien fuera libélula!
Hola María.
Precioso poema de una libélula que desea la libertad junto a un amor tan especial.
"Cuidar tu sueño para que no se escapen tus sueños"
Muy bonito.
Feliz día y besos, niña.
Me gusta mucho, sencillo y hermoso.
"Apenas sin fuerza, exhausta,
se dejó caer en mi almohada.
Yo la cogí entre mis manos
para llevarla a la libertad,
pero ella sintió paz y alegría
y decidió volar a mi lado, libre".
Estos versos son geniales.
Un beso y feliz día.
Afortunada libélula que duerme pegada a tu preciosa cara. Siempre que duermas con la cabeza en la almohada, claro. El poema muy bonito.
Besitos
Bonito y muy de tu estilo. Envidia sana, por tus versos y la libélula que puede compartir tu espacio.
Un besito.
Muy lista la libélula, muy lista.
Besos, María. Bonito
Usted siempre rodeada de originalidad.Dulce es como pastel
Siempre gracias y un besico.
Publicar un comentario