viernes, 3 de agosto de 2012

Entre las palmeras, la luna
















Si me abrazas como hoy, no me sueltes,
deja que me funda contigo bajo la luna
entre las palmeras vigilantes.
Si percibes que desespero o me hundo,
encuentra un remedio para mi mal,
tú, que calmas todos mis pesares.
Si ves que mis ojos no brillan como ayer,
busca aquella estrella que se reflejaba en ellos
y no la dejes escapar, que en ella está la luz
que veo en tus pupilas cuando nos encontramos.
Si notas mis mejillas mojadas, no las seques,
junta tu cara con la mía y calla, no hables,
solo escucha mi corazón, él te contará.



María Arteaga


***

11 comentarios:

Gil dijo...

Si escucharamos siempre al corazon el mundo seria mas bello sin dudas. Como tus bellisimos versos bien dicen... en ella esta la luz que veo en tus pupilas cuando nos encontramos... Hermoso Maria!!

Besos y se feliz!

El Sol dijo...

Hola preciosa.

Habrán más poetas, pero dudo que hoy exista alguien que lo haga tan simple y hermoso como tú. Eres genial.

Un beso y feliz fin de semana, niña.

Anónimo dijo...

Precioso. Palmeras y luna en agosto, muy bello escribe usted

Nereidas-andresdeartabroblogpost,com dijo...

Ese Tu hermoso corazón romántico,
que hace desprender de tus ojos el fulgor de mil pasiones que te llenan de hermosa juventud, porque siempre se es todo lo joven que permite ser el propio corazón .
¡Qué lindos y dulces tus versos!.
Besos.

Solina dijo...

ternura y romance encerrados en tus versos, el silencio todo lo cubre y llena de quietud cuando se encuentra al lado del ser que se ama... pensamientos llenitos de amor y de anhelos.

Un abrazo sin fronteras para ti.

Talismán dijo...

Verso tras verso unes las palabras justas para hacer un poema precioso.
Cada día le pones un color más brillante. Felicidades, María.
Me gusta todo, pero esos cuatro versos son espléndidos.

"Si ves que mis ojos no brillan como ayer,
busca aquella estrella que se reflejaba en ellos
y no la dejes escapar, que en ella está la luz
que veo en tus pupilas cuando nos encontramos".

Un beso y sé feliz.

uno de lejos dijo...

La luz va contigo y tus letras. Donde te encuentres eres un poema lleno de vida. No cambies y escribe, escribe. Besos desde lejos

Anónimo dijo...

...y la luna se asomó entre las viejas hojas del mar de palmeras.
Y la luna, encantada, alargó la más preciosa de sus colas de plata, que iluminó la pluma de la poetisa, plena de amores y dulzura.

¡Enhorabuena, María! Cada día te creces más, y nos haces más pequeños al no tener tu talento e inspiración.

J.A dijo...

Hola María.

Daría mi fortuna por saber poner solo un verso en un papel en blanco, daría mi tiempo y te haría miles de regalos. Enséñame a escribir poemas aunque sean de un solo verso.
Un cálido abrazo.
J.A

uno más dijo...

Precioso, como la cola de las palmeras de plata. Verso tras verso.

Un beso, María.

María dijo...

"...y la luna se asomó entre las viejas hojas del mar de palmeras.
Y la luna, encantada, alargó la más preciosa de sus colas de plata, que iluminó la pluma de la poetisa, plena de amores y dulzura".
***
Gracias a cada ser que se mete en este pasillo, siempre encuentro comentarios hermosos. A veces...poesías maravillosas.
Besos para todos, que cada cual escoja el suyo.