El Sol se apaga despacito
en un ocaso perfecto.
Dunas de arena blanca,
árboles de ramas sorprendidas
al ver sus ojos cerrados.
El día prepara su despedida
llorando gotas de cielo.
Le tengo pegado a mi
en un silencio dormido,
juntos, mi cabeza en su hombro
su corazón latiendo en mi pecho.
Días de dicha infinita,
noches de abrazos perpetuos.
Besos, caricias y sueños.María Arteaga
***
7 comentarios:
Hola!
Hoy, mi blog cumple su primer año. Si lo deseas te puedes llevar a la niña que os abraza a tu blog.
Con mucho cariño,
Tessa
Qué bonito te ha quedado, como un pasilo encerado!!
Hola María.
Seguramente me repito, pero eres un cielo de persona y poetisa, dulce y sutil. Me encantas.
Un beso, niña.
Divino.
"El día prepara su despedida
llorando gotas de cielo".
Un beso María
Hola María, siempre es un placer leer tus versos.
Saludos cordiales
Que bonito es el amor cuando se vive tan intensamente como tu lo expresas.
saludos.
Gracias y besos de corazón en esta noche distinta y única.
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